Son dos horas y media de producción venezolana las que relatan los dos nobles ideales del libertador Francisco de Miranda que aun a riesgo de morir por su tenaz lucha consigue para su nación la Independencia de la España monárquica que explota las colonias del Nuevo Mundo.
Miranda luchara también en otras contiendas europeas y en la norteamericana para conseguir la libertad de los países y el reconocimiento de la igualdad de derechos de los hombres independientemente de sus orígenes o condición.
La película es lenta y muchas de sus imágenes se ruedan en interior.
Al igual que La Villa del Cine, está dirigida por Luis Alberto Lamata y contiene una función didáctica más que histórica. Aporta, al igual que su predecesora, algunas claves para entender la compleja personalidad de Miranda, quien puso su mundo y su tiempo al servicio de sus ideales, sueños y ambiciones.
En cuanto a las actuaciones, destacan Jorge Reyes (Miranda) y Luis Abreu (Salim adulto), además del actor norteamericano Danny Glover como un esclavo haitiano.
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